Una dieta equilibrada, una vida sana

Llevar una dieta equilibrada es esencial para llevar una vida sana.

La nutrición es esencial para el funcionamiento de una persona. Es una de las funciones vitales de los seres vivos. De los alimentos, se obtienen y transforman los nutrientes necesarios para el ser humano, en función de las características personales de cada uno.

Para mantenernos sanos, la alimentación debe equilibrarse con el descanso, el ejercicio y la hidratación.

Es necesario comer alimentos que sean lo menos perjudiciales para el cuerpo. Por ejemplo, en vez de optar por tomar algún alimento procesado, que aporta más características negativas que beneficios, prueba a tomar una manzana.Al contrario de lo que se piensa, mantener una dieta equilibrada no significa rechazar todos los alimentos que podemos considerar “caprichos”. Lo mejor es optar por comidas preparadas por uno mismo y evitar los precocinados, que aportan más grasas. 

Beneficios de una dieta equilibrada y saludable

La OMS (Organización Mundial de la Salud) dice que “una dieta saludable ayuda a protegernos de la malnutrición en todas sus formas, así como de las enfermedades no transmisibles, entre ellas la diabetes, las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares y el cáncer”.

Llevar una dieta equilibrada es fundamental. Debe incluir alimentos de todos los grupos de nutrientes. Si se compagina con ejercicio, ayuda además de a perder peso, a ganar calidad en salud. 

Ingerir la cantidad necesaria de alimentos que aportan vitaminas, protege al cuerpo y fortalece el sistema inmunológicocontra aquellas posibles enfermedades que uno pueda contraer. 

Mantener esa dieta equilibrada, con todos los nutrientes necesarios para que el cuerpo funcione de manera eficiente, va a suponer también un beneficio mental. Va a reducir la ansiedad, aumentar el rendimiento cerebral y mejorar el estado de ánimo de las personas.

Empezar una vida saludable

Si quieres empezar una rutina más saludable y no sabes cómo, te dejamos algunos consejos.

Primero, debes tener en cuenta cuáles son tus metas. Tienen que ser realistas. También pensar que el cambio no va a ser de un día para otro, tendrás que estar decidido e ir poco a poco.

Nunca te saltes las comidas. Debes hacer las obligatorias a lo largo del día, que son 5 o 6. Hacerlo así te ayuda a repartir tus ganas de comer durante el transcurso de la jornada y evitar el ansia. 

En las comidas principales, que son desayuno, comida y cena, debes incluir todos los nutrientes necesarios. Una vez tengas esta dieta equilibrada y variada, tu calidad de vida mejorará.

Como ya has leído antes, debes sustituir los elementos artificiales por alimentos naturales. También evitar aquellas comidas que tengan mucha grasa, como los fritos, y optar por los hechos a la plancha.

Mantén un equilibrio junto con la hidratación y el deporte. Beber agua te ayuda a digerir mejor los alimentos y por tanto es beneficioso para la digestión. El deporte te ayuda en tu salud física y mental.

Come bien, de tal manera que obtengas los nutrientes necesarios para un buen funcionamiento del organismo y la energía necesaria para afrontar el día.

Ya has aprendido las ventajas que va a tener para tu bienestar el tener una dieta saludable. Ahora, debes comprometerte con el cambio y el proceso para introducirte en tu vida saludable.

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